Vívidos ojales de nubes. Trayectorias desafiantes. Cruceros salvajes por el centro de la flor. La piedra que como una esponja de tiempo conversa con el satélite y la ubre. Hay un camino que nadie ve. Hay un silencio desconcertante que despierta al mundo al amanecer
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Fotografía de Eugenia Raschetti
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